El Supremo revoca la sentencia de la Audiencia de Ávila que consideró que no había relación entre la actuación médica y la situación de la joven que tiene ahora un grado de minusvalía del 70%
La sala de lo civil del Tribunal Supremo ha revocado la sentencia de la Audiencia de Ávila que desestimó la demanda interpuesta contra …… y la Clínica ….. por los daños y perjuicios causados a una paciente a la que se le diagnosticó una infección de orina cuando padecía una peritonitis. El diagnóstico llegó tarde y la joven se ha quedado con un grado de minusvalía del 70%.
La paciente acudió a urgencias por un fuerte dolor abdominal. Los médicos le diagnosticaron una infección de orina, le recetaron Nolotil y le dijeron que se fuera a casa. El dolor era insoportable y volvió a urgencias. Se le hicieron más pruebas pero no fue hasta unos días más tarde cuando llegó el diagnóstico correcto: peritonitis. Los médicos la operaron y el postoperatorio fue complicado. La paciente, que tenía 16 años, ha quedado con secuelas graves. No puede hablar bien, tiene una parálisis en el lado derecho y un grado de minusvalía del 70%.
Ni el juez de primera instancia, ni la Audiencia de Ávila le dieron la razón. Ahora sí que lo hace el Tribunal Supremo que fija una indemnización de 276.000 euros por el “error en el diagnóstico inicial”. Indemnización que deberán abonar la Cía. xxxx y el centro médico. Dicen los magistrados que una actuación más coordinada “hubiera podido proporcionar al paciente los medios curativos con la urgencia y diligencia necesarias”.
